Me gusta el planteamiento que habla, de que el emprendimiento contemporáneo es la manera más fácil de quedar pobre o endeudado y esto se sustenta en una crisis fundamental de la sociedad actual: Priorizar la acción superficial sobre el pensamiento profundo y el mérito genuino.
En un entorno saturado de ruido y soluciones rápidas, el aspirante a emprendedor se enfrenta a trampas ideológicas que lo alejan de la compleja realidad y la responsabilidad, condiciones necesarias para el éxito trascendente.
1. El Riesgo de Actuar sin Pensar: Evasión de Responsabilidad.
La cultura moderna promueve la ideología de "no te preocupes, actúa”, incentivando la acción constante y desaconsejando el pensamiento profundo. Sin embargo, si una persona aspira a ser el "arquitecto de su propia vida" o diseñar un proyecto empresarial, este proceso requiere un acto crucial de "no acción", dedicado a la interiorización, la proyección, la visión y la planeación.
La prisa por actuar convierte al emprendedor en un instrumento de ideas ajenas. Cede ante la presión social y se deja guiar por frases como "Sé tu propio jefe" o "Si no trabajas por tus sueños, alguien lo hará por ti"
No pensar antes de actuar es irresponsable. Muchos siguen consejos ajenos como si no fueran responsables de sus propios fracasos. Y muchas veces de manera inconsciente se hace para tener a quién culpar después, evitando así el tener que aceptar los fracasos, que implica la responsabilidad de los propios actos. Un emprendimiento sin planificación profunda es un proyecto que busca transferir la culpa, lo cual es insostenible en el largo plazo.
2. La Búsqueda de Fama Antes que de Mérito
Existe una confusión profunda en la sociedad donde se confunde el mérito social y el celebritismo con el conocimiento real y la inteligencia. Muchos aspirantes a emprendedores se centran en cómo "crecer en las redes", "conseguir posicionarse", "O ser un referente", podemos visualizarlo diariamente en redes sociales, con esta tendencia en videos de todo tipo.
Si analizamos esta tendencia, y el objetivo es realmente ser una figura pública o influir en el mundo, ¿No sería lógico que primero se debería "soltar el celular" y dedicarse a un asunto realmente importante durante muchos años, descubriendo o argumentando algo trascendente"
Si no se ha logrado algo de mérito real, el esfuerzo por generar contenido es solo "ruido en una red que está saturada". Un proyecto que prioriza el ego sobre el mérito real, contribuye al problema, en lugar de resolverlo. Además, las ambiciones falsas a menudo buscan llenar un vacío existencial que no se llena con dinero o fama.
3. El Peligro del Pensamiento Reductivo y los "Gurús"
El camino más rápido al fracaso es ignorar la complejidad del problema. Una de las enfermedades ideológicas más grandes que existen es el pensamiento reductivo. Esta consiste en reducir toda la complejidad de un problema a la propia capacidad para entenderlo y sabemos que los problemas reales no son tan simples como quisiéramos que fueran.
El emprendedor que busca atajos es vulnerable a los "gurús". Esta gente que repite un mantra como si fuera la verdad absoluta está y al final solo esta tratando de vender algo.
Al seguir estas fórmulas, los emprendedores se enfocan en el sujeto del conocimiento (frases de gurus o citas inspiradoras) y no en la sustancia del conocimiento (el proceso nutritivo y complejo de cómo se llega a la idea). Lo valioso es la sustancia, el cómo se llega hasta ahí, no la frase misma, que da una falsa sensación de que la gente es dueña de ese conocimiento. Seguir atajos y repetir frases es una ruta segura para evadir el conocimiento valioso que se necesita para navegar la complejidad de un negocio.
4. La Motivación Genuina Nace del Contraste
Emprender con éxito implica enfrentar obstáculos. La negatividad es necesaria, ya que el único sentido de los propósitos son los obstáculos. Si la motivación se basa únicamente en la búsqueda de felicidad o placer constante, el propósito de cambio no será real.
La mente humana funciona por contraste y armonía. Si todo es felicidad, nada es felicidad; si todo es placer, nada es placer. Es crucial darle lugar a la negatividad y al sufrimiento (el obstáculo) para que el propósito de cambio sea fuerte. De lo contrario, la motivación se vuelve susceptible a la manipulación ideológica.
5. Conclusión
la dificultad del emprendimiento actual no reside solo en el mercado, sino en la responsabilidad individual. Evitar el pensamiento profundo, buscar la fama antes del mérito, seguir soluciones mágicas y evadir la negatividad son las causas subyacentes que convierten la ambición empresarial en una ruta peligrosa hacia el fracaso financiero y la frustración.
💡 Pregunta para la comunidad: ¿Cómo ven ustedes esta tesis del emprendimiento moderno? ¿Creen que hoy en día se valora más la apariencia de éxito que el mérito real en el emprendimiento?.